sábado, 10 de enero de 2009

Reservoir Dogs


"Perros desahuciados", "Perros condenados", "Perros desesperados", o como se tradujo aquí en algún momento, el infame: "Perros encerrados"... Reservoir Dogs, es el guión que todo novato querría haber escrito.
Que todo aspirante a escritor o cineasta, sueña con escribir en la oscuridad cerrada de su infecto cuchitril de aspirante, sin demasiada esperanza. De aspirante desesperado, que a veces sueña también, con tirar de una vez todo por la borda, y organizar ese atraco "perfecto" con el que todo desahuciado social sueña de vez en cuando.
Sí juntas toda esa energía inmaculada, ese ánimo y tesón, vocación y talento, te puede salir con suerte algo tan magnífico, sublime, demoledor y perfecto como esta peli. Obra Maestra concebida desde los suburbios de la podredumbre y el anonimato, y las alturas del hambre y la desesperación.

Concebida para ser rodada con tres duros y cuatro amigos en un almacén abandonado cualquiera, a modo de teatro galvanizado, donde la tensión se masca en cada dialogo y cada silencio, donde los disparos se sienten reales, como la fuerza de los sentimientos y realidad de los personajes.
Donde esos 4 amigos y 3 duros, te hacen vivir emociones impensables para tantas grandes producciones podridas de dinero, y vacías de contenidos o ideas nuevas. Emociones que no consiguen soñar, ni pagando sueldos millonarios a adocenados guionistas, adictos a las huelgas.

Ese fue "el toque mágico" de la revolución Tarantiniana: coger todas las tradiciones, todo el cine de siempre, y reinventar sus normas, sin salirse de ellas. Ofrecer cine espectáculo, desde la entrañas podridas del cine espectáculo, hacer nacer vida, pasión, sentimientos, donde ya no había nada, salvo apatía y repetición.
¿Que otra cosa sí no, es el talento?... Aportar una visión nueva a los argumentos y situaciones más viejas. Derrochar pasión y crear vida de la muerte. Sacar algo de donde otros ya no ven nada.
Conseguir trasmitir esa pasión y esa vida en cada fotograma, en cada dialogo, hasta emocionar al espectador, trasladándolo directamente al escenario de la acción; involucrarlo en ella, por lo acertado y audaz de su planteamiento, lo venal y cercano de sus personajes, lo certero y trasgresor de sus maneras.

Por que, en definitiva: ¿no es la película de siempre?... Cuatro tipos planeando y llevando a cabo el robo de sus vidas...
Y, a la vez pregunto y espero una respuesta sincera: ¿no es la película mas renovadora, original e impactante que has visto en los últimos 20 años?...

Eso fue el "efecto Tarantino". No se puede explicar de otra manera.
Así de simple, y así de complicado.
Puro talento desinhibido.
Un genio.


Sencilla, y obviamente: 10. (Absoluto, "puro", desmesurado...)