viernes, 15 de julio de 2011

BREAKING BAD










¡Que SOBERBIOS dos actores se han agenciado para esta maravilla! Y que buena química hay entre ellos.
Su relación, y la historia: creíble. Por sorprendente/disparatada que pueda parecer.

Y es que eso es lo GRANDE de Breaking Bad: que consiguen suspender nuestra credibilidad, una y otra vez, con la naturalidad de lo real.
Todo es duro y extremo, los personajes están más manoseados y "jodidos" por la vida que muñecos de feria, y es como sí siempre se les diera una 2ª oportunidad.
Por eso nos mantenemos pegados al televisor, esperando a ver cual es la siguiente vuelta de tuerca de los guionistas. O sí ya se les acabará, cualquier día de estos, la suerte a nuestros protagonistas
Y es que es como sí nosotros mismos nos hubiéramos arriesgado a dar ese salto mortal, con el que todo el mundo fantasea alguna vez. Y la conocida morbosidad del ser humano nos empuje a estar al lado del precipicio, fascinados por su altura.

Es al ascensión de dos personajes comunes, triviales, mediocres, al estrellato de una peli de acción. Sin algaradas, ni pirotecnias inverosímiles; poco más que con buena suerte.
Porque solo gana quien se arriesga.
¿Y quién puede negar que en la vida pasan cosas sorprendentes?.

Es el cambio de mentalidad de esas dos almas mediocres, al "lado oscuro" de la delincuencia. Su caída y el vértico inherente. La adrenalina y la ascensión del ego.

¡Y como saben dejarnos con la miel en los labios tras cada temporada!

Siempre un paso más allá, que no sabemos dónde nos llevará. Pero que siempre nos fascina.

Todo plagado de secundarios a la altura, como el cuñado policía, etc.
O esos "malos" antológicos, dignos del mejor Tarantino (¡Ay.. Ese señor Salamanca!).

Pero, sobre todo, como he dicho la fuerza radica en los dos protagonistas principales. En esa mirada desahuciada de Heinselberg; dura y fría como el agua de glaciar, que te atraviesa, y te intimida, a la vez que nos fascina.
¿Por que quién nos dice que cualquiera de nosotros no podría convertirse en él, a la vuelta de la esquina?
Empujado por las circunstancias, y un destino dolorosamente irrefutable.


I LOVE Breking Bad.